8.6.12

¿De aquí falta salir? Judíos de una España en crisis


  "No digas, no digas que eres judía". M. Grecia.

          Ya nos hemos habituado a escuchar que existe en Europa un paralelismo entre la crisis de 1929 y la actual crisis financiera. La crisis en titulares tiene una cronología marcada por países: Grecia, Italia, España… Países con comunidades judías diminutas o residuales si se comparan con los Estados Unidos, la Argentina, México o Brasil. Y en las que el porcentaje de emigración a Israel desde su creación ha sido bajo, simbólico o simplemente nulo. Eran países en los que la actitud hacia Israel se podía resumir en un simbólico y romántico apoyo en actos públicos. Vacaciones en la playa con jornada de parque temático espiritual en Jerusalén. Y un siempre más pragmático, pero lejano, sentimiento de “y por si pasa algo y hay que escapar un día”. Para un porcentaje desproporcionado de judíos europeos, parece que ese momento ya ha llegado.

18.8.11

PILIS Y MARIS


La imagen es terrible. Por muchas razones. Una señora llamada María Antonia le dice a otra llamada Pilar: “Pero el público tiene que saber ciertas cosas si tú no fueras una sionista convencida. Una pro-judía militante. De las que practican el terrorismo militar contra el pueblo palestino”. Y utiliza ambos términos, “judío” y “sionista” con ese deje del “si yo te contara…”. Que implica que alguien que cae en cualquiera de ambas categorías, la de tener algo que ver con los judíos o algo que ver con el sionismo no es en el fondo ni normal, ni trigo limpio. De hecho, la señora que se llama María Antonia lo dice para quitar toda credibilidad a la señora llamada Pilar en lo que dice. Como quien dice maricón, rojo, fascista o cualquiera de esas palabras que en el fondo no dicen nada de nada. Son palabras retrete, en las que uno vierte ese fondo sucio que tiene dentro. Como cuando en un partido de fútbol se le menta la madre al árbitro. Una vez dicho, a otra cosa. Como quien va al baño. No es personal, sino fisiológico.
Esta semana y por distintos medios he recibido un link de una entrevista llevada a cabo a la señora que se llama Pilar, aquella contra la que la señora María Antonia avisaba al público de que no había que hacerla mucho caso porque era una “pro-judía militante” que es decir “de las que practica el terrorismo militar contra el Pueblo Palestino”. La entrevista es parte de la campaña de promoción de un libro que no leeré: “La república islámica en España”. Fue llevada a cabo en mayo, pero por alguna extraña razón es esta semana, y no en mayo, cuando la he recibido. Y la verdad que al ver la entrevista completa y contrastarla con el enfrentamiento entre Pilar y María, me ha recordado un refrán latino que utilizaba Celso; ese de los dos idiotas que pelean por la sombra de un burro. Parece ser que el mérito de la señora que se llama Pilar es la de “defender Israel” en un entorno y un país, España, en que el término Israel es una muy, muy mala palabra. Y en el que ser anti-israelí no es una opción, sino parte de la etiqueta, como en la Francia de Proust ser anti-semita era, simple y llanamente, parte del buen tono de la buena sociedad. Así que, con todos los respetos, me permito compartir algunas ideas sobre lo que dice la señora Pilar.

26.8.10

La Sinagoga del Corazón (Primera Parte)


    Su extraño y contradictorio nombre de sinagoga/iglesia, Santa María la Blanca, es lo que mejor describe la particular naturaleza del edificio. En teoría ha servido durante más tiempo como templo cristiano que como casa de estudio y oración judía; pero en la práctica es una sinagoga. No puede ser otra cosa. Pero lo realmente paradójico es que se considere como una de las grandes obras del arte almohade. Es como decir que una sinagoga es la expresión más acabada del arte nacionalsocialista. El problema no son los almohades en sí, sino el criterio de clasificación. “Almohade” sólo nos habla de una fecha, enmarca un periodo y produce esa ficción de que al poder enmarcar un evento en un calendario tenemos la posibilidad de ser testigos. Cuando en la práctica para el caso de esta construcción se confirma lo que dice Derrida: “Una fecha está loca: nunca es lo que es, lo que dice que es, siempre es más o menos que lo que es”. Los Almohades no pusieron nunca un pie en Toledo y de hecho en el momento en que se tiene la primera noticia sobre su construcción, ya hace más de un siglo que la ciudad está en manos cristianas y ya nunca más dejará de estarlo. Y en realidad en la relación con el tiempo, de la que la fecha es al mismo tiempo expresión y definición, en este momento el tiempo se mide con cuatro calendarios; el de Era, que se inicia en el -38. El año cero de Hispania es el año en que finalmente un general puede ser el protagonista en el más grandioso de los espectáculos de una Roma ávida de espectáculos: el triunfo. El haber pacificado un región. La condición de ser merecedor de una entrada triunfal era el matar al menos a 5.000, ser parte de la nobleza y traer de vuelta las tropas a casa y anunciarle al Senado que han regresado. En pocas ocasiones no hubo regresos. Una de ellas en el 135, durante la Rebelión de Bar Kojba. La olvidada llamada segunda revuelta judía que fue mucho más terrible que la destrucción del Segundo Templo. Pero en ese calendario, en el de la Era, ahí termina todo lo relacionado con los judíos, con la destrucción del Templo en el 105 de la Era.

8.6.10

6.6.10

MANUEL TAPIAL (JUNIOR): EL TESTIGO IMPOSIBLE DEL “LLEGARON MATANDO”.

   
           La imagen corresponde con un fotograma de un vídeo grabado en la cubierta superior del Mavi Mármara y es parte de ese material que ha estado disponible por todas partes desde los primeros minutos del asalto (de ahí la mala calidad de la imagen). No procede de las cámaras de la IDF, del Ejército de Defensa de Israel, sino del Mavi Mármara mismo. La escena completa no dura ni un segundo y dado el punto de vista, parece que un hombre esta apaleando al soldado con una barra. Pero cuando se observa con atención, aparece este segundo hombre que lo apuñala. Sin si quiera poder afirmarlo, su perfil parece el de Cengiz Akyük, de 41 años, procedente de Iskenderun, casado y padre de tres hijos, que figura entre los abatidos por la IDF. Apuñala al soldado con la mano derecha, en un contundente movimiento de arriba abajo. De momento, de 700 pasajeros, nos encontramos con uno muy concreto que lleva a cabo un ataque con intención de matar. Deducir a partir de ahí que se merecía que lo mataran o que los otros 699 eran terroristas, es descabellado y atenta, sobre todo, contra el sentido común. Incluyo la escena de vídeo en diversas velocidades donde pese a la mala calidad de la imagen se aprecia claramente la fuerza con la que se produce el ataque.